En esta ocasión, lo que hice no era para Sara, pero era para otra princesa, mi hermana Bea. Tenia una camiseta que no se ponía, era la típica camiseta de siempre, pero era un regalo de su chico, el cual toca en un grupo de música, y ya sabéis como es esto del amor... le hice un arreglito y se quedo muy curreta, ahora con unos vaqueros queda chulísima.


No hay comentarios:
Publicar un comentario